Contenidos de esta página sobre Roma
- Los mejores tours y para hacer en Roma
- Primero que nada: el alojamiento
- Qué ver en Roma en un fin de semana – Día 1
- Fontana di Trevi
- El Panteón de Roma
- Visita guiada por el Panteón de Agripa
- Plaza Navona
- Plaza del Popolo
- Un paseo por las plazas más bonitas de Roma
- Segundo día en Roma
- Basílica San Pedro
- Museos Vaticanos y Capilla Sixtina
- Visita guiada a Museos Vaticanos y Capilla Sixtina
- Castillo de Sant'Angelo
- Visita guiada por el Castillo Sant’Angelo
- Trastevere
- Tercer día en Roma
- Basílica San Juan de Letrán
- Coliseo Romano
- La mejor manera de visitar el Coliseo, Foro y Palatino
- Foro Romano
- Tarjetas turísticas Roma
- Plaza Venecia y Palacio del Quirinal
- De compras por Via del Corso y Via del Condotti
- Plaza España
- Y ahora… ¡un merecido helado!
- Los mejores tours y actividades para hacer en Roma
¿Tienes poco tiempo para visitar la ciudad eterna y no sabes por dónde comenzar?
¿Tienes sólo un fin de semana para recorrer Roma? ¡Pues aquí te diremos los lugares claves, qué ver en Roma en 2 días, por dónde empezar y como llegar a ellos para que aproveches al máximo el tiempo.
¡Verás que vale la pena!
Primero que nada: el alojamiento
Te recomendamos primero que nada que el lugar donde escojas tu alojamiento esté lo más céntrico y mejor ubicado posible.
Puedes escoger entre la multitud de hoteles que están en los barrios del centro de Roma y sobre todo por los alrededores de la estación Termini Roma. (De allí salen la mayoría de los autobuses y es la estación central en donde llegan las dos líneas del metro).
Cualquier alojamiento en los barrios de Parione, Pigna o Monti es un acierto, ya que están muy cerca de los principales monumentos de Roma y podrás llegar caminando a muchos de ellos.
Si buscas un poco más de independencia o la opción de una estancia más auténtica, hay apartamentos en Roma que te sorprenderán, tanto por sus precios como por su decoración única.
Qué ver en Roma en un fin de semana – Día 1
Fontana di Trevi
Primero dirígete a la Fontana de Trevi. Se trata de uno de los lugares más mágicos y encantadores de Roma, un lugar obligado al que debes ir, que además ¡es gratis!
El Panteón de Roma
Desde la famosa fuente, puedes irte también caminando hasta el Panteón de Roma (8 min aprox.) que es un rediseño de la época de Adriano, quien mandó a hacer este monumento en honor a todos los dioses y es una bellísima estructura digna de apreciar.
La entrada al Panteón es gratuita, así como muchos otros museos de Roma. Descubre cuáles son los días gratis en los museos de Roma y a los que puedes entrar gratis siempre.
La siguiente parada a pie es la Plaza Navona (5 min aprox) en donde quedarás admirado con su elegancia y su diseño. No sólo es una de las más famosas de Roma, era el lugar donde se encontraba el antiguo Estadio de Domiciano, que podía acoger hasta 20.000 personas.
Puedes ser testigo de la magia de este lugar alojándote en pleno centro de Roma en cualquiera de estos hoteles en Plaza Navona.
Plaza del Popolo
Prosigue en búsqueda de la estación Ottaviano y tomas el metro hasta Plaza del Popolo y de allí caminas por Vía del Corso en donde encontraras un sinnúmero de tiendas.
Segundo día en Roma
Basílica San Pedro
Nada menor que comenzar el día en la imponente Plaza de San Pedro.
La Basílica de San Pedro, ubicada en la Ciudad del Vaticano, es uno de los centros más importantes del catolicismo y uno de los edificios más grandes en el mundo. La cantidad de obras de arte que alberga es impresionante.
Museos Vaticanos y Capilla Sixtina
A continuación te recomendamos reservar una de las visitas guiadas más importantes que puedes hacer el Roma: los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina. Los lugares más importantes que puedes visitar en la Ciudad del Vaticano están incluidos en esta completa visita. (Mira más detalles en el botón situado un poco más abajo de este texto).
La primera parada de la visita serán los Museos Vaticanos. Tu guía te llevará por una selección de las principales salas donde verás obras maestras del arte universal que incluyen esculturas, tapices y frescos.
Los Museos Vaticanos reúnen una de las colecciones de arte más impresionantes del mundo.
Luego será el turno de un momento muy especial, visitar la Capilla Sixtina. Tendrás el privilegio de admirar frescos de Miguel Ángel y de importantes pintores del renacimiento italiano.
Castillo de Sant'Angelo
Desde el Vaticano tienes la opción de llegar al Castillo de Sant’Angelo. Este monumento de Roma, fue construido por el emperador Adriano para que fuera su mausoleo, pero terminó formando un papel defensivo muy importante.
Trastevere
Trastevere es uno de los barrios más encantadores de Roma. Puedes hacer una agradable caminata bordeando el río Tíber y no te tomará más de 20-25 minutos llegar al corazón del barrio desde el Castillo Sant'Angelo.
¿Qué hacer en Trastevere? Perderte por sus calles, admirar algunas de sus edificaciones impresionantes como la Basílica de Santa María en Trastevere o la Villa Farnesina. Si visitas un domingo, puedes visitar el mercadillo Porta Portese (abierto hasta las 2:00 pm), callejear por sus calles serpenteantes y muy recomendable: buscar una ostería o trattoría para cenar.
Los restaurantes con terraza son perfectos para almorzar o cenar una pizza sin prisa, mientras observas a la gente pasar.
Tercer día en Roma
Estas son algunas de las actividades que puedes dejar para tu tercer día en Roma. Si te sobra tiempo o no es tu primera vez visitando la capital italiana, puedes guardar un día para acercarte a alguna de las ciudades cerca de Roma.
Basílica San Juan de Letrán
La Basílica de San Juan de Letrán es una de las cuatro basílicas papales de Roma junto a la de Basílica de San Pedro, San Pablo Extramuros y la de Santa María la Mayor y la más antigua de Roma, siendo consagrada en el año 324.
En su impresionante interior destacan sus cinco naves, cada una con más de cien metros de largo, así como la arquitectura barroca de Francesco Borromini, el arquitecto que la transformó en el siglo XVII.
La entrada es gratuita, aunque la entrada prioritaria a San Juan de Letrán incluye acceso a zonas restringidas como la Scala Santa, el Baptisterio y el Claustro, entre otros.
Coliseo Romano
En este tercer día ¡definitivamente debes comenzar con el Coliseo Romano! El tour del Coliseo, Foro Romano y Palatino comienza a las 11:00 am. (Puedes reservarlo en el botón de abajo).
Para llegar, toma el metro B dirección Laurentina y luego de dos estaciones, estarás en la parada «Colosseo» en donde al salir a la superficie te encontrarás con la majestuosa imagen de la legendaria edificación.
Foro Romano
Recuerda que el mismo ticket te sirve para entrar luego al Foro Romano, donde conocerás uno de los emblemas de la Antigua Roma.
Tarjetas turísticas Roma
Dependiendo de tu estilo de viajar, te puede convenir adquirir una tarjeta turística. Las dos principales de Roma son la Roma Pass Omnia y la Go Rome Explorer Pass. Te recomendamos hacer clic en cada una para que puedas ver cual te conviene más. Incluso podrás ver una comparativa de sus mayores ventajas.
Plaza Venecia y Palacio del Quirinal
Al salir puedes dirigirte a la Via dei Fori Imperiali, en dirección Via del Corso, y luego de unos 10 minutos a pie, encontrarás a tu derecha el Foro Augusto y el Foro Traiano.
A tu izquierda, la Plaza Venecia en donde verás el monumento a Vittorio Emanuele II, desde allí en otro 10 min estarán en el Palacio del Quirinal que es la actual residencia oficial del Presidente de la República Italiana.
De compras por Via del Corso y Via del Condotti
Desde Plaza Venecia puedes tomar la Via del Corso y pasar una tarde comprando o curioseando por las tiendas. Eventualmente te encontrarás con Via dei Condotti, otro de los sitios ideales de Roma para ir de compras.
Plaza España
Finalmente, encontrarás la Plaza España al final de Via del Condotti, donde podrás descansar un poco y absorber el mejor ambiente de la ciudad. Muy cerca de aquí, dispones de una enorme variedad para degustar pastas y pizzas en Roma a buenos precios.
Y ahora… ¡un merecido helado!
Después de estos dos días de intensa caminata, lo mejor es detenerse a comprar un cremoso helado, la mejor recompensa de conocer una gran parte importante de Roma.